San Pedro Apóstol
Simón Pedro, también conocido como San Pedro, fue uno de los discípulos más destacados de Jesús de Nazaret y es considerado el primer papa por la Iglesia católica.
Origen y llamado
Nacido en Betsaida, Galilea, Simón era pescador de oficio. Su hermano Andrés lo presentó a Jesús, quien le cambió el nombre a Pedro (del arameo «Kefas», que significa «roca») y le dijo: «Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia» (Mateo 16:18). Este pasaje es fundamental para la doctrina católica sobre el primado de Pedro.
Papel en la Iglesia primitiva
Pedro fue una figura central en la comunidad cristiana primitiva. Presidió la elección de Matías para reemplazar a Judas Iscariote y predicó en Pentecostés. También realizó milagros, como la curación de un paralítico y la resurrección de Tabita. Participó en el Concilio de Jerusalén, donde se discutió la admisión de gentiles en la Iglesia.
Muerte y legado de San Pedro
Según la tradición, Pedro murió mártir en Roma alrededor del año 67 d.C., crucificado cabeza abajo por no considerarse digno de morir como Jesús. Se cree que fue enterrado en el Vaticano, donde se construyó la Basílica de San Pedro. En 1968, el Papa Pablo VI anunció que se habían encontrado restos que podrían ser de Pedro.
Iconografía San Pedro
San Pedro es representado frecuentemente con llaves, simbolizando las llaves del Reino de los Cielos que Jesús le confió. También se le asocia con una cruz invertida, en referencia a su forma de martirio, y con un gallo, recordando sus negaciones a Jesús antes de la crucifixión.