Catedral de Pamplona

Catedral Metropolitana de Santa María la Real

La Catedral Metropolitana de Santa María la Real, ubicada en la ciudad de Pamplona, en Navarra y en Camino de Santiago Francés. La Catedral de Pamplona es un tesoro arquitectónico que destaca no solo por su belleza, sino también por su singularidad. Como sede de la Archidiócesis de Pamplona y Tudela, este complejo catedralicio es un testimonio vivo de la historia y la fe que ha marcado la región de Navarra.

Advocación y Devoción en la Catedral de Pamplona

Desde tiempos inmemoriales, la Catedral de Pamplona ha estado bajo la protección y devoción de Santa María de la Asunción, cuya festividad se celebra el 15 de agosto, coincidiendo con la fiesta de la Asunción de la Virgen María. Esta advocación ha sido arraigada en la historia y la identidad de la catedral desde su fundación, siendo un símbolo de la fe y la devoción de los fieles.

Evolución de la Advocación

Cambios a lo largo de la Historia

A lo largo de los siglos, la advocación del templo ha estado ligada a diferentes nombres que reflejan la riqueza y diversidad de la tradición religiosa. Según el historiador José Goñi Gaztambide, se han registrado diversas denominaciones a lo largo del tiempo, como Nuestra Señora del Sagrario, Santa María la Real, Santa María de Pamplona, Santa María la Blanca, Nuestra Señora de los Reyes y la Virgen del Medio Agosto.

Controversia y Reflexión

En el siglo XX, surgieron debates sobre la advocación adecuada para la imagen titular de la catedral. El capellán Mariano Arigita Lasa fue una figura relevante en este proceso, al solicitar en 1905 la restauración del «título primitivo» de Santa María la Real de Pamplona. Sin embargo, el historiador Goñi Gaztambide señala que no hay evidencia documental de esta advocación primitiva.

Reflexiones Actuales

Análisis y Recomendaciones

La controversia sobre la advocación llevó al Cabildo catedralicio a solicitar un informe a los sacerdotes Nestor Zubeldía y Onofre Larumbe en 1936. Tras analizar numerosos documentos, concluyeron que el título original consagrado por el Fuero General era Santa María de Pamplona, recomendando su preservación.

Legado y Devoción Continua

Independientemente de las controversias históricas, la devoción a la Virgen María ha perdurado a lo largo de los siglos en la Catedral de Pamplona. La imagen de Santa María, sea cual sea su advocación, sigue siendo un símbolo de fe y esperanza para los fieles que acuden a venerarla.

En conclusión, la advocación de la imagen titular de la Catedral de Pamplona ha sido objeto de debate a lo largo de la historia, pero su importancia es innegable como un elemento central de la identidad religiosa y cultural de la región.

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