Iglesia de San Nicolás de Bari Burguete

Iglesia de San Nicolás de Bari Burguete

La iglesia de San Nicolás de Bari es una destacada iglesia católica ubicada en el municipio de Burguete, que se encuentra en la región de Navarra, en el norte de España. Esta iglesia no solo es un lugar de culto importante para los feligreses locales, sino que también es la única iglesia parroquial del municipio, lo que significa que se le conoce a menudo como la iglesia parroquial de Burguete o simplemente como la iglesia parroquial de San Nicolás de Bari. Esta denominación refleja su papel central en la vida religiosa de la comunidad de Burguete.

La iglesia está situada en la calle principal del pueblo de Burguete, que, históricamente, se ha desarrollado como un punto de parada para los caminantes y peregrinos que recorren el Camino de Santiago Francés. Este camino es conocido por ser una ruta de peregrinación que atrae a miles de visitantes cada año, quienes buscan alcanzar la Catedral de Santiago en la ciudad de Santiago de Compostela. Además, la iglesia de San Nicolás de Bari tiene una conexión significativa con la cercana colegiata de Roncesvalles, un lugar emblemático también en el contexto del Camino de Santiago.

En relación con la importancia cultural y patrimonial de la iglesia, España ha trabajado en la ampliación del reconocimiento de los caminos de Santiago como patrimonio de la humanidad. Para ello, el país envió a la UNESCO un extenso dossier que se titula «Inventario Retrospectivo – Elementos Asociados», presentado bajo la referencia n.º 669bis. Este documento incluye una detallada lista de 1912 elementos que se consideran bienes asociados con el Camino de Santiago, aunque no todos ellos están inscritos como Patrimonio de la Humanidad. En este inventario, la iglesia de San Nicolás de Bari ocupa un lugar relevante, evidenciando así su valor histórico y cultural en el contexto del Camino de Santiago y su papel en la comunidad de Burguete.

Historia Iglesia de San Nicolás de Bari Burguete

La iglesia de San Nicolás, ubicada en la villa de Burguete, es un bello ejemplo de arquitectura de origen medieval, aunque durante su extensa historia ha sufrido la destrucción en numerosas ocasiones debido a incendios devastadores. Según documentos históricos, se sabe que esta iglesia ya existía en el año 1104, lo que demuestra su larga trayectoria a lo largo de los siglos. El aspecto que podemos observar hoy en día es el resultado de la última fase de reconstrucción, que tuvo lugar entre los años 1945 y 1968. En el año 1965, se elaboró un proyecto de restauración del interior de la iglesia, diseñado por el arquitecto Miguel Gortari, quien llevó a cabo un trabajo que buscaba revitalizar y mantener la esencia del lugar. Durante las diferentes etapas de reconstrucción, se incorporaron elementos y restos de las edificaciones anteriores, los cuales todavía se pueden apreciar en la estructura de la iglesia actual, lo que le confiere un carácter histórico y único.

Entre los elementos más antiguos que se han conservado en la iglesia se encuentran dos hermosas ventanas abocinadas que están ubicadas en la cabecera y en un tramo cercano al crucero. Estas ventanas son vestigios de la antigua iglesia medieval que fue destruida en los incendios. Asimismo, se pueden observar restos de ménsulas y nervios en la cabecera y en el área del crucero, los cuales datan del siglo XVI. Sin embargo, el elemento más destacado que se conserva en la actualidad es la magnífica portada monumental de la fachada, que fue construida en 1699. Esta impresionante obra fue costeada por la familia Oroz, una familia notable de Burguete, y su escudo de armas se muestra con orgullo sobre la portada de la iglesia. En 1943, este escudo se adoptó oficialmente como el emblema de la villa de Burguete, lo que realza aún más su importancia histórica y cultural.

La iglesia ha enfrentado desafíos a lo largo de su historia. En el año 1861, un incendio destruyó no solo la iglesia, sino también la casa parroquial, la torre y el coro del templo. La reconstrucción de estos elementos se llevó a cabo bajo la dirección del arquitecto Pedro de Asoleaga, quien presentó un proyecto para restaurar la iglesia, aunque con algunas variaciones en comparación con la estructura original.

A pesar de que la edificación que vemos actualmente es de origen más moderno, la presencia de elementos antiguos en su diseño y la vinculación histórica de este templo con el Camino de Santiago Francés, que pasa justo frente a sus puertas, le han valido un reconocimiento especial. En el año 2014, la iglesia de San Nicolás fue incluida en el catálogo de bienes asociados al Patrimonio de la Humanidad, como parte del sitio conocido como Caminos de Santiago en España, resaltando la importancia cultural y espiritual que este lugar ha representado a lo largo de los años.

Descripción Iglesia de San Nicolás de Bari Burguete

La descripción de la iglesia es bastante interesante y revela detalles significativos sobre su estructura y el arte que alberga. Esta iglesia tiene una planta formada por una sola nave que se divide en tres tramos. Además, cuenta con un crucero, que es una parte importante de la iglesia, y también con un tramo adicional que corresponde a la cabecera, que tiene un diseño recto. El crucero, que se destaca en la planta de la iglesia, tiene la misma altura que la nave principal. Los muros de esta estructura están construidos con sillarejo, un tipo de piedra que se utiliza para dar soporte a las construcciones, y la cubierta está enlucida, lo que le da un acabado más atractivo.

En el interior de la iglesia, la nave está cubierta con bóvedas de arista, que son esas estructuras de arquitectura que crean ángulos y permiten un diseño triangular. Por otro lado, la cabecera y los brazos del crucero están cubiertos con bóvedas de lunetos, que tienen una forma más redonda y suave. En la parte trasera, encontramos el coro, que se levanta a los pies de la iglesia y está hecho de obra, lo que significa que está bien construido con materiales sólidos. Para acceder a una sacristía moderna, que tiene forma rectangular y se compone de dos tramos, se puede entrar desde el crucero de la Epístola pasando por un arco de medio punto, que es una forma arquitectónica típica de la época.

En el aspecto exterior, la fachada de la iglesia está construida con sillar, que es un tipo de piedra trabajada, y termina en una parte ascendente conocida como piñón. Esta parte de la fachada está flanqueada por pináculos, que son esas torres pequeñas que se ven en las iglesias. Justo en el centro de la fachada se encuentra un reloj, que es muy útil para los feligreses y visitantes, y la fachada culmina con una torrecilla cuadrada en la parte más alta. En la parte inferior de esta misma fachada, se conserva una portada que data de finales del siglo diecisiete, específicamente de estilo barroco clásico. Esta impresionante obra fue realizada por el cantero Juan de Mihura en el año 1699.

En el lado del Evangelio de la iglesia, los muros muestran grandes lienzos que tienen óculos, que son pequeñas aberturas que permiten la entrada de luz, y están separados por contrafuertes, que ayudan a mantener la estructura estable. También es notable el saliente brazo del crucero que se destaca en esta parte.

En la torre de la iglesia, que es donde se encuentran las campanas, hay una campana en particular que se distingue de las demás. Esta campana está dedicada a Santa María y data de 1672, como se puede leer en su propia superficie. Esta campana fue un regalo de la colegiata de Roncesvalles en el año 1864, como agradecimiento por la ayuda que se prestó durante varios incendios; se menciona que es la antigua campana de la ermita de Ibañeta.

Es importante mencionar que el ajuar de la iglesia, que incluye elementos como retablos y pinturas, no logró sobrevivir a los saqueos realizados por las tropas francesas ni a los incendios que ocurrieron posteriormente. Por ello, la totalidad de los elementos que se encuentran en la iglesia son toda obra moderna. No obstante, se han logrado conservar algunas piezas antiguas de orfebrería que ahora se exhiben en la sacristía. Entre la imaginería que se encuentra en la iglesia destacan dos elementos importantes. Uno de ellos es un crucificado de madera de roble, que fue esculpido por Aureo Rebolé en el año 1966. El otro es una imagen de gran tamaño que representa al titular de la parroquia, obra de Anselmo Salanova, la cual fue donada a su pueblo en el año 1806 por Andrés Gurpide, quien era un vecino de Zaragoza y un defensor notable de los Sitios que sufrió la ciudad durante la Guerra de la Independencia. Más recientemente, en el presbiterio se ha colocado un retablo barroco que proviene de la antigua parroquia de Santa Engracia de Sarriguren, ubicada en Egüés.

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