Video Etapa 28: Portomarín a Palas de Rei con Jhonatan Barrios

Video Etapa 28: Portomarín a Palas de Rei | Camino Francés con Jhonatan Barrios

Video Etapa 28: Portomarín a Palas de Rei | Camino de Santiago Francés con Jhonatan Barrios

Jhonatan Barrios detalla la experiencia vivida durante la Etapa 28 del Camino de Santiago Francés, que lo llevó de Portomarín a Palas de Rei, recorriendo un total de 24.5 kilómetros. Este tramo fue completado a lo largo de un mes, desde el 26 de abril hasta el 26 de mayo del año 2022.

Durante el recorrido, Jhonatan quedó impresionado por la multitud que se había congregado en Portomarín. Cientos de personas se dirigían hacia Palas de Rei, que representaba el destino final para muchos peregrinos del Camino de Santiago Francés. En cada pequeño pueblo que atravesaban, los bares y restaurantes estaban abarrotados de gente en busca de un desayuno. Las largas filas de espera llevaron a Jhonatan y su grupo a continuar caminando hasta encontrar un lugar menos concurrido donde pudieran satisfacer su apetito.

El video que Jhonatan grabó sobre esta etapa fue breve, ya que prefirió no capturar la abrumadora cantidad de personas que compartían el sendero, ni la intensa lluvia que los acompañó durante gran parte del trayecto. Al llegar a Palas de Rei, Jhonatan decidió disfrutar de una tranquila cena y visitar la Iglesia de San Tirso. En esta ocasión, se dedicó a apreciar la hospitalidad del albergue y a entablar conversaciones más profundas con su grupo de compañeros de viaje.

Etapa 28: Portomarín a Palas de Rei con Jhonatan Barrios

El Camino de Santiago: La Experiencia de Jhonatan Barrios en la Etapa 28 hacia Palas de Rei

El Camino de Santiago, conocido por su profunda carga espiritual y su rica historia, es una travesía que muchos emprenden buscando algo más que un simple destino. Jhonatan Barrios, un peregrino comprometido, nos narra su experiencia en la etapa 28 del Camino Francés, que se extiende desde Portomarín hasta Palas de Rei. Esta etapa de 24,5 kilómetros ofrece no solo retos físicos, sino también momentos de reflexión y una conexión íntima con la naturaleza y la historia de España.

La Salida de Portomarín: El Inicio de una Jornada Desafiante

Cruzando el Río Miño y Ascendiendo al Monte de San Antonio

La jornada de Jhonatan comenzó temprano en la mañana, bajo un cielo nublado que presagiaba una caminata difícil. Partiendo desde el albergue en Portomarín, un pequeño pueblo con encanto situado a orillas del Río Miño, Jhonatan y sus compañeros peregrinos iniciaron la etapa cruzando el emblemático puente que atraviesa este majestuoso río, también conocido como el Río Torres.

El ascenso hacia el Monte de San Antonio fue uno de los primeros desafíos del día. Este tramo, caracterizado por su pendiente pronunciada, requirió un esfuerzo considerable por parte de Jhonatan y los demás caminantes. A medida que subían, el aire fresco de la mañana y la vista panorámica del paisaje gallego brindaban una sensación de serenidad, aunque la subida no dejaba de exigir una resistencia física notable.

El Aumento de Peregrinos en el Camino

A diferencia de las etapas anteriores, Jhonatan notó un incremento significativo en el número de personas en la ruta. Según él, el número de peregrinos se había multiplicado por tres o cuatro, lo que añadió un nuevo nivel de complejidad a la experiencia. Este aumento no solo afectó la fluidez del recorrido, sino que también comenzó a impactar los servicios disponibles en los pequeños pueblos por los que pasaban, lo que Jhonatan describe como una saturación evidente en albergues y áreas de descanso.

A Través de los Pueblos Gallegos: Historia y Cultura en Cada Paso

Gonzar, Castro Mayor y Hospital de la Cruz: Pasos Sin Detenerse

El camino desde Portomarín hasta Palas de Rei está salpicado de pequeñas aldeas y pueblos, cada uno con su propio encanto y significado histórico. Entre los primeros pueblos que Jhonatan cruzó se encuentran Gonzar, Castro Mayor, y Hospital de la Cruz. Sin embargo, debido a la multitud de peregrinos, Jhonatan decidió no detenerse mucho en estos lugares. A pesar de esto, no dejó de notar la belleza rústica y la tranquilidad que cada uno de estos pueblos ofrecía a los viajeros que se aventuraban a explorarlos más a fondo.

Ventas de Narón y Ligonde: Un Vistazo al Pasado

Ligonde, uno de los pueblos más históricos por los que pasó Jhonatan, es conocido por haber sido un importante punto de parada para los peregrinos en la Edad Media. Este lugar, situado en la falda de la Sierra de Ligonde, fue regido en su tiempo por los Caballeros de la Orden de Santiago. Contaba con un cementerio y un hospital para peregrinos, reflejando la hospitalidad que ha caracterizado al Camino de Santiago a lo largo de los siglos.

La historia viva en Ligonde es palpable, y aunque Jhonatan no pudo detenerse tanto como habría deseado debido a la lluvia y la multitud, su paso por esta localidad dejó una profunda impresión. La arquitectura, las ruinas y los vestigios de la época medieval resonaban con un eco de siglos de peregrinación y devoción.

Los Desafíos del Camino: Clima y Multitudes

Lluvia y Demoras: Un Reto en el Camino

El clima no siempre es favorable en el Camino de Santiago, y Jhonatan lo vivió en carne propia. Durante esta etapa, la lluvia comenzó a caer intensamente, haciendo el terreno resbaladizo y aumentando la dificultad de la caminata. La lluvia también trajo consigo el desafío de mantener el equipo seco y continuar avanzando en condiciones menos que ideales.

Además de las inclemencias del tiempo, la gran cantidad de peregrinos generó demoras en los servicios de los pueblos por los que pasaban. La saturación se hizo evidente en los albergues y en los puntos de descanso, donde las largas filas y la espera para conseguir un lugar para descansar se convirtieron en parte del día a día de los peregrinos. Jhonatan tuvo que ajustar su ritmo y sus expectativas, aceptando estos desafíos como parte integral de la experiencia.

Descanso en Portos: Un Respiro Necesario

Después de varias horas de caminata bajo la lluvia y lidiando con las multitudes, Jhonatan y su grupo llegaron a Portos, donde encontraron un albergue para refugiarse, secarse y reponer energías. Aquí, tuvieron la oportunidad de disfrutar de una tradicional empanada gallega y un pedazo de tarta de Santiago, dos delicias locales que ofrecieron un momento de reconfortante placer en medio de la dura jornada.

El descanso en Portos no solo fue físico, sino también mental. La oportunidad de sentarse, secarse y disfrutar de una comida caliente fue revitalizante, y les permitió a Jhonatan y a sus compañeros continuar el camino con renovado vigor.

La Llegada a Palas de Rei: Un Encuentro con la Historia

El Significado de Palas de Rei en el Camino de Santiago

Finalmente, tras una larga y ardua caminata, Jhonatan llegó a Palas de Rei, un destino que marcaba el final de la etapa 28. Este pueblo, cuyo nombre proviene de «Palatium Regis» o Palacio Real, tiene una rica historia que se remonta a la época visigoda, cuando fue residencia de un monarca en el siglo VII. Durante la Edad Media, Palas de Rei se mencionaba en el Códice Calixtino como un punto crucial en la peregrinación hacia la Catedral de Santiago en la ciudad de Santiago de Compostela.

A pesar del cansancio acumulado, Jhonatan aprovechó la oportunidad para explorar las calles de este histórico pueblo. La iglesia de San Tirso, construida a finales del siglo XII, fue uno de los puntos más destacados de su visita. Esta iglesia conserva su portada románica original en la fachada principal, un testimonio del arte y la arquitectura medieval que aún perduran.

Albergue en Palas de Rei: Descanso y Preparativos para la Siguiente Etapa

Jhonatan y su grupo se alojaron en el Albergue Sendoira, un lugar acogedor y bien equipado que ofreció el descanso necesario después de un día tan intenso. Como en la mayoría de los albergues del Camino, aquí se seguía la tradición de dejar los zapatos y bastones afuera, lo que ayudaba a mantener el espacio limpio y cómodo para todos los huéspedes.

El albergue también contaba con áreas comunes bien cuidadas, como un comedor, una sala de espera, y lavandería, donde Jhonatan pudo lavar su ropa y prepararse para la siguiente etapa del camino. Después de una cena reconfortante y un paseo nocturno por las calles de Palas de Rei, Jhonatan se retiró a descansar, listo para enfrentar la etapa número 29 (Video Etapa 29: Palas de Rei a Arzúa con Jhonatan Barrios) con la misma determinación que lo había llevado hasta allí.

Reflexiones Finales sobre la Etapa 28 del Camino de Santiago

Una Experiencia de Resiliencia y Conexión

La etapa 28 del Camino de Santiago, desde Portomarín hasta Palas de Rei, fue para Jhonatan Barrios una experiencia llena de desafíos y recompensas. Desde la subida inicial al Monte de San Antonio hasta la llegada al histórico pueblo de Palas de Rei, cada paso fue un testimonio de la resiliencia y la conexión profunda que se puede lograr en el Camino.

Los retos climáticos, las multitudes de peregrinos y las dificultades del terreno no hicieron más que reforzar la importancia de la comunidad y la solidaridad entre los caminantes. Cada pueblo, cada albergue, y cada encuentro en el camino añadió una capa de riqueza a la experiencia de Jhonatan, quien supo encontrar en cada obstáculo una oportunidad para aprender y crecer.

Preparándose para las Últimas Etapas

Con solo tres etapas más por delante antes de llegar a Santiago de Compostela, Jhonatan se encontraba en la recta final de su peregrinación. Las experiencias vividas en la etapa 28, con su mezcla de historia, cultura, y retos personales, lo habían preparado para enfrentar con valentía y optimismo lo que aún quedaba por recorrer.

El Camino de Santiago no es solo un viaje físico; es una travesía espiritual y emocional que transforma a quienes lo caminan. Para Jhonatan Barrios, cada kilómetro recorrido era un paso más hacia un objetivo mayor, no solo llegar a Santiago, sino encontrar un sentido más profundo en cada huella dejada en el sendero.


Conclusión

La etapa 28 del Camino de Santiago, desde Portomarín hasta Palas de Rei, representa un microcosmos de lo que es la peregrinación completa: desafíos físicos, encuentros con la historia, y la inevitable conexión con otros peregrinos que comparten el mismo camino. A través de la narración de Jhonatan Barrios, podemos entender mejor la complejidad y la belleza de esta jornada, que es tanto un viaje hacia un destino físico como una exploración interior. Cada paso, cada pueblo, y cada momento de reflexión contribuyen a la


¡Buen Camino, peregrinos!